En Castellón, a las 15 horas del día 7 de noviembre del año 2015, se reúne el Jurado seleccionador previsto en las bases que rigen el Concurso de Microcuentos Fantàsti’CS15 para fallar los premios de la VI edición.
El Jurado está compuesto por los siguientes miembros:
Verónica Segoviano
Rosario Raro
Juan Vicente Centelles
El Jurado acuerda:
Primero. Que han participado 80 relatos a esta edición del certamen, procedentes de todas las Comunidades Autónomas del Estado Español y que de ellos han sido seleccionados y cumplen los criterios del concurso 36
Segundo. Que tras una minuciosa selección, han resultado finalistas los siguientes relatos:
25. EL HILO DE LA VIDA, por JM DEL SALTO
2. EL TATUAJE por FRANCISCO PLANA ESTRUCH
Tercero. Que, tras las oportunas deliberaciones, se procede a otorgar los premios establecidos en las bases, resultando el siguiente FALLO:
PRIMER PREMIO: Dotado con dar título al libro recopilatorio del VI Certamen de microcuentos Fantàsti’CS15, 10 ejemplares del libro y lote de revistas JOT DOWN, por mayoría del Jurado, al relato titulado “El hilo de la vida”, del autor JM del Salto
PREMIO FINALISTA: Dotado con la aparición de su microcuento en el libro recopilatorio titulado “El hilo de la vida” y un ejemplar de la revista JOT DOWN para “El tatuaje” por Francisco Plana Estruch
PREMIO SELECCIONADOS: Dotado con la aparición de sus microcuentos en el libro recopilatorio titulado “El hilo de la vida”.
Finalizada la reunión, se levanta acta con la conformidad de los presentes. El fallo se dará a conocer a los ganadores el día 7 de noviembre y se hará público el día 15 de noviembre a las 20h.
Ganador:
25. EL HILO DE LA VIDA, por JM DEL SALTO
El ojo derecho me estaba matando, así que me levanté de la cama. De camino al baño no dejaba de frotármelo. Estaba húmedo e irritado. Al llegar me miré en el espejo. En un principio pensé que se trataba de una legaña o alguna pestaña, pero era otra cosa. Tenía una textura mucosa pero era firme y oscuro. Con cuidado lo cogí, usando la punta de los dedos para extraerlo suavemente y fui tirando. Se deslizaba son delicadeza, saliendo de mi cuenca ocular. Mi sensación de alivio disminuía a media que, pese a llevar unos segundos extrayendo, no parecía que terminara de sacármelo del todo. Empecé a impacientarme e incrementé la marcha, pero no aquello no tenía fin. Tras minutos tirando de aquello, generando un montón en el suelo, logré sacarlo todo. Perdí la vista durante unos segundos y cuando la recuperé vi como del montón se alzaba una silueta. Era yo, pero no tenia ojos. Me cogió los míos.
Finalista:
2. EL TATUAJE por FRANCISCO PLANA ESTRUCH
Salí del local con el nuevo software chino de tatuaje instalado en el brazo. Se controlaba desde una uña del dedo, que hacía las veces de pantalla táctil. Lo encendí. Al instante, el increíble tatuaje de un marinero apareció impreso en mi hombro. ¡Brutal! El realismo del diseño en 3D era enorme. Fui raudo a enseñárselo a mi novia. Le gustó. Me sonreía. Pero de pronto se puso pálida. El tatuaje se había bajado los pantalones y se estaba masturbando. ¡El puto marinero incluso gemía! Ana salió corriendo, insultándome. Decidí devolver el tatuaje. A mitad de camino, un individuo mal encarado se acercó y me amenazó con una navaja. Pensé en salir corriendo pero, de repente, oí un disparo y el ladronzuelo cayó abatido al suelo. El marinero empezó a reír, con la pistola aún humeante en su mano y los pantalones en el suelo. La otra pistola también colgaba pero estaba descargada. Salí corriendo. ¿Cómo iba a explicar esto?
El Jurado está compuesto por los siguientes miembros:
Verónica Segoviano
Rosario Raro
Juan Vicente Centelles
El Jurado acuerda:
Primero. Que han participado 80 relatos a esta edición del certamen, procedentes de todas las Comunidades Autónomas del Estado Español y que de ellos han sido seleccionados y cumplen los criterios del concurso 36
Segundo. Que tras una minuciosa selección, han resultado finalistas los siguientes relatos:
25. EL HILO DE LA VIDA, por JM DEL SALTO
2. EL TATUAJE por FRANCISCO PLANA ESTRUCH
Tercero. Que, tras las oportunas deliberaciones, se procede a otorgar los premios establecidos en las bases, resultando el siguiente FALLO:
PRIMER PREMIO: Dotado con dar título al libro recopilatorio del VI Certamen de microcuentos Fantàsti’CS15, 10 ejemplares del libro y lote de revistas JOT DOWN, por mayoría del Jurado, al relato titulado “El hilo de la vida”, del autor JM del Salto
PREMIO FINALISTA: Dotado con la aparición de su microcuento en el libro recopilatorio titulado “El hilo de la vida” y un ejemplar de la revista JOT DOWN para “El tatuaje” por Francisco Plana Estruch
PREMIO SELECCIONADOS: Dotado con la aparición de sus microcuentos en el libro recopilatorio titulado “El hilo de la vida”.
Finalizada la reunión, se levanta acta con la conformidad de los presentes. El fallo se dará a conocer a los ganadores el día 7 de noviembre y se hará público el día 15 de noviembre a las 20h.
Ganador:
25. EL HILO DE LA VIDA, por JM DEL SALTO
El ojo derecho me estaba matando, así que me levanté de la cama. De camino al baño no dejaba de frotármelo. Estaba húmedo e irritado. Al llegar me miré en el espejo. En un principio pensé que se trataba de una legaña o alguna pestaña, pero era otra cosa. Tenía una textura mucosa pero era firme y oscuro. Con cuidado lo cogí, usando la punta de los dedos para extraerlo suavemente y fui tirando. Se deslizaba son delicadeza, saliendo de mi cuenca ocular. Mi sensación de alivio disminuía a media que, pese a llevar unos segundos extrayendo, no parecía que terminara de sacármelo del todo. Empecé a impacientarme e incrementé la marcha, pero no aquello no tenía fin. Tras minutos tirando de aquello, generando un montón en el suelo, logré sacarlo todo. Perdí la vista durante unos segundos y cuando la recuperé vi como del montón se alzaba una silueta. Era yo, pero no tenia ojos. Me cogió los míos.
Finalista:
2. EL TATUAJE por FRANCISCO PLANA ESTRUCH
Salí del local con el nuevo software chino de tatuaje instalado en el brazo. Se controlaba desde una uña del dedo, que hacía las veces de pantalla táctil. Lo encendí. Al instante, el increíble tatuaje de un marinero apareció impreso en mi hombro. ¡Brutal! El realismo del diseño en 3D era enorme. Fui raudo a enseñárselo a mi novia. Le gustó. Me sonreía. Pero de pronto se puso pálida. El tatuaje se había bajado los pantalones y se estaba masturbando. ¡El puto marinero incluso gemía! Ana salió corriendo, insultándome. Decidí devolver el tatuaje. A mitad de camino, un individuo mal encarado se acercó y me amenazó con una navaja. Pensé en salir corriendo pero, de repente, oí un disparo y el ladronzuelo cayó abatido al suelo. El marinero empezó a reír, con la pistola aún humeante en su mano y los pantalones en el suelo. La otra pistola también colgaba pero estaba descargada. Salí corriendo. ¿Cómo iba a explicar esto?